·Nombre común: rata relámpago
·Categorías taxonómicas:
-Dominio: Eucarionte.
-Reino: Animalia / Metazoa (reino animal).
-Filo: Chordata (Cordado).
--Subfilo: Vertebrata.
->Superclase: Tetrapoda.
-Clase: Mammalia (Mamífero).
--Subclase: Theria.
--Infraclase: Eutheria.
-Orden: Rodentia (Roedores).
--Suborden: Myomorpha.
->Superfamilia: Muroidea.
-Familia: Muridae (Múridos).
--Subfamilia: Murinae.
-Género: Rattus
-Especie: Rattus fulgurum
·Historia del espécimen: Por efecto del deterioro medioambiental ocasionado por las actividades del ser humano, las tormentas del futuro pueden llegar a ser más violentas, de manera que cada vez se desprenderá menos agua de lluvia y más relámpagos en cada tormenta. Por efecto de ésto, la posibilidad de que un relámpago toque el suelo terrestre aumentará conforme pase el tiempo y las tormentas se vuelvan más violentas, hasta el punto de que dichos relámpagos capaces de alcanzar el terreno puedan aniquilar seres vivos, tanto humanos como animales. Por ello, la población tanto humana como animal podría reducirse. En esta ocasión, me voy a centrar en el caso de las ratas: éstas, además de vivir bajo el suelo terrestre, por lo cual estarían medianamente protegidas, suelen habitar junto a edificios construidos por humanos, mayormente fábricas o centrales eléctricas. En el caso de que habiten junto a centrales eléctricas, existe la posibilidad tanto de que un relámpago alcance a la población roedora cuando ésta esté en tierra firme como de que se produzca un fallo en la central eléctrica y una parte de la población roedora muera electrocutada, por lo que una buena parte de dicha población moriría y cada vez sería más urgente un mecanismo de defensa contra estas amenazas contra la vida de las ratas. Por cosas de la genética, podría darse el caso de que apareciera una mutación en un espécimen, cuyos efectos posibilitaran la supervivencia ante estos electrizantes factores adversos: la capacidad de almacenar voltajes elevados en los filamentos de los pelos que recubren su cuerpo, capacitando de esta manera a los especímenes para resistir a los factores adversos ya mencionados y para, además, descargar estos voltajes en dosis controladas como método de defensa. Esta mutación sería un factor positivo, por lo que, gracias a la función de reproducción, empezarían a aparecer más individuos con esta mutación, y se terminaría constituyendo como nueva especie.
Esta especie no difiere demasiado de las ratas comunes (obviamente, la principal diferencia es la mutación que las caracteriza). Son mamíferos, por lo que están dotados de pelo, mamas y paren a sus crías, las cuales se empiezan a desarrollar previamente en el vientre materno. Pueden adaptarse a varios entornos, generalmente habitan entornos urbanos cercanos a centrales, fábricas o espacios abiertos. Debido al almacenamiento de electricidad en los filamentos de su pelo, estos especímenes se caracterizan por poseer un color que evoca la electricidad, generalmente un amarillo intenso o un azul eléctrico (es raro encontrar un espécimen que no presente uno de estos dos colores), y en cuanto a alimentación, suelen obtener alimento a partir de restos y basura, pero cuando por error usan la electricidad almacenada para defenderse de un depredador y lo matan, no le hacen ascos a la carne chamuscada. Cabe destacar la matización de ese "por error", pues estos especímenes no son agresivos; únicamente usan la electricidad para defenderse, son bastante dóciles y no es difícil encariñarse con ellos. De hecho, como mascota podrían ser tan comunes como un hámster, y si se los adiestra bien, se puede emplear la electricidad que almacenan para beneficiar a su dueño.
Imágenes del espécimen:
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